lunes, 19 de mayo de 2014

Nace una Repùblica

  El 20 de mayo de 1902, a las doce horas del día, se llevo a cabo en el Palacio de la Plaza de Armas, en La Habana, la ceremonia de transmisión de poderes. Leonard Wood, gobernador militar de la Isla hasta aquel momento en representación de los Estados Unidos, leyó dos documentos: uno firmado por Theodore Roosevelt, presidente de la Unión, y otro suscrito por él, con el carácter expresado. Ambos estaban dirigidos al Presidente y al Congreso de la República de Cuba. El de Roosevelt expresó sus votos por el buen éxito del nuevo gobierno y por el mantenimiento de la amistad entre los Estados Unidos y Cuba. El de Wood, más extenso, entrò en consideraciones acerca de la administración que cesaba y declarò terminada la ocupación y el gobierno de la Isla por la Unión. Estrada Palma leyó una corta exposición, dirigida a Wood, por la cual se dio por enterado oficialmente de lo dicho por Roosevelt y Wood y admitió que Isla de Pinos, quedaba bajo la jurisdicción de Cuba, a reserva de lo que sobre su situación jurídica definitiva acordasen los gobiernos de Washington y La Habana.

 
Máximo Gómez izando la bandera cubana después del ceremonial del inicio de la Republica en 1902  Foto Gómez de la Carrera.




El cambio de banderas se efectuó en los mismos momentos en que se producía en Palacio la ceremonia en que hablaron Wood y Estrada Palma. Minutos después el Presidente de la República, requerido por el del Tribunal Supremo de justicia, prometió por su honor desempeñar fielmente su cargo, cumpliendo y haciendo cumplir la constitución y las leyes del país. Estos actos, en los que no podía faltar una honda emoción, estuvieron acompañados del entusiasmo delirante de las personas que en distintos lugares de la capital de la Isla participaban de la alegría de un hecho glorioso. Las mujeres y los hombres que presenciaron la mudanza de pabellones aplaudieron y lloraron: sus vítores y lágrimas resumían los anhelos y sacrificios de varias generaciones de patriotas, de los que unos habían perecido en la demanda heroica y otros eran actores y testigos del gran acontecimiento que a todos conmovía.
 
 Los sargentos E.J. Kelly y Frank Wundrock que tuvieron a su cargo el cambio de banderas.



El hecho de que en los edificios públicos ondease la bandera de la estrella solitaria simbolizaba mucho más que, una transmisión de poderes: simbolizaba el advenimiento de Cuba a la soberanía internacional. Ya la Isla, desde el 20 de mayo de 1902, formaba parte del concierto de las naciones libres e independientes. Lo que esto llevaba costado llenaba las mejores páginas de la historia patria. En la mayor de las islas del Caribe se iniciaba una vida nueva: la vida vigorizada y lustrada por la soberanía internacional.
 
Fue así que el  20 de mayo de 1902, la República de Cuba surge lastrada en su soberanía por la interesada mediación del naciente imperialismo norteamericano. El peligro avizorado por José Martí pasa a ser realidad. Como escribió Máximo Gómez en su diario de campaña, los americanos amargaron, con su tutela impuesta por la fuerza, "la alegría de los cubanos vencedores y no supieron endulzar la pena de los vencidos". Nuevos mambises, con Fidel al frente, continuaron la obra iniciada por el Ejército Libertador desde 1868 para que, en 1959, se hiciera realidad la República con todos y para el bien de todos que soñó José Martí..

Desde aquella fecha hasta nuestros dìas la bandera de la estrella solitaria ondea en lo alto del Morro de La Habana.



                                                                             Fotos: Josè M. Correa


viernes, 16 de mayo de 2014

Día del campesino cubano

                                                                 Foto Josè M, Correa                                                          
Un 17 de Mayo de 1946 fue asesinado Niceto Pérez García en la zona realenga de El Vínculo, en la provincia Guantánamo, al extremo oriente de Cuba. Por tal motivo en esta fecha se celebra el Día del campesino cubano y constituye una fecha muy especial para los hombres y las mujeres del campo.

Niceto Pérez García. Símbolo del campesinado cubano, gran luchador, por sus hazañas se convirtió en faro para los campesinos cubanos.

Niceto era un humilde campesino guantanamero que trabajaba la tierra en su pequeña finca Maria Luisa, asentada esa localidad y formaba parte del Realengo 18.
Corrian los tiempos del gobierno de Ramón Grau San Martín, época en la que los campesinos cubanos eran desalojados de sus terruños y tenían que irse a los caminos con su familia portando solo lo que cupiese en sus carretas o incluso a veces en sus propias manos.
 
 El terrateniente y geófago Lino Mancebo intentó desalojar al valiente campesino de sus tierras para apropiárselas, pero Niceto Pérez decidió no claudicar.
Lino Mancebo no se quedó de brazos cruzados y una mañana se hizo acompañar de un grupo de guardajurados se presentó en la finca del campesino cubano, quien, en compañía de su hijo de siete años de edad, se encontraba limpiando una plantación de plátano. Esa mañana del 17 de Mayo de 1946, Niceto, el campesino cubano, fue ultimado en presencia de su propio hijo.



 Por este cruel motivo y en ese mismo lugar, los campesinos de la zona erigieron un modesto monumento y proclamaron el 17 de mayo como día del campesino en homenaje a Niceto.



 Los miembros de la Organización Joven Cuba no podían permitir que el crimen quedara impune, ya que el gobierno títere de Grau San Martín permitía todas aquellas atrocidades, por tal motivo los jóvenes revolucionarios ajusticiaron al criminal Lino Mancebo en los portales de la Lonja del Comercio, en ciudad de La Habana.
El reconocimiento definitivo a la memoria de Niceto Pérez fue realizado por decisión del Comandante en Jefe Fidel Castro al escoger este día, el 17 de Mayo de 1959, para promulgar la Ley de Reforma Agraria, hecho que sucedió en La Plata, Sierra Maestra, lugar donde radicó la Comandancia del Ejército Rebelde durante la guerra liberada contra el gobierno de Fulgencio Batista
La Primera Ley de Reforma Agraria es la más importante y trascendente ley rubricada tras el triunfo de la Revolución cubana. Es la ley que otorga las tierras a los campesinos cubanos. A partir de ese momento las tierras comenzaron pasar a manos de sus verdaderos dueños y se materializaba uno de los postulados de La Historia me Absolverá. 



                                                                                                                    fotos Josè M. Correa

Por todo esto se crea, el 17 de mayo de 1961, la Asociación Nacional de Agricultores Pequeños (ANAP), organización que agrupa a los campesinos cubanos y representa sus intereses en lo económico y social.